Dra Kósmica

¿Qué hubiera pasado si cuando niña en mi barrio hubiera existido un proyecto comunitario como la Biblioteca Ma' Juana o la Biblioteca Hoja de Ruta? Me pregunté durante el festejo del V aniversario de la Biblioteca. La respuesta fue, n o lo sé. El hubiera no existe, las realidades paralelas sí. Es decir, la otra versión de la vida está ahí esperando a ser leída y lo impresionante es que la puedes invitar a que viva en el presente; así es que, fui paciente y al transcurrir las horas el airecito sutil que da escalofrío en el cuello, la cabeza y los sueños (la magia), me dijo de esa realidad que ayer se reunió, ¿qué dijo?. Dijo de los años setentas en México, los nacimientos y las adversidades, habló de la adoración a los santos, la Biblia, y los dones; me hablaba de un ladrón de talentos tripartita televisión-estado-religión, fue una especie de pesadilla porque los mexicanos en lugar de rostro tenían máscaras varias, los habían metido en la camisa de fuerza del peor de los manicomios

Mi charla circula así: El espacio donde mi espíritu habita es mi cuerpo. El alma sabe de ese territorio, seré honesta y valiente, reconoceré la historia en cada milímetro de las cicatrices, las manchas, las arrugas, las pecas y mis labios. Aprenderé un nuevo lenguaje. El cabello, los dientes, la uñas también hablan. Mis pies, ah, mis pies, ¿cómo son? ¿quién los ve? Mis siete sentidos los narran. A. Mi territorio B. El espejo C. Los siete sentidos y la narrativa de mi cuerpo D. Mujeres cósmicas bajo la luna azul

Esta noche tenemos luna azul, es un fenómeno  que sucede cada dos o tres años. Contemplaré el color; aspiraré profundo, aspiraré a sanar a mi amada tierra. Aspiraré el amor, luces eternas y ciegas.  Y cuentan las abuelas que esta noche se debe aprovechar muy bien para cortar lo tóxico, retomar lo hábitos positivos e iniciar nuevas.  Mi bisabuela dijo: Abra la ventana y déjese bañar por la luna mientras duerme.  Ponga un vaso de cristal grande, gigante a la luz de la luna, déjelo ahí toda la noche y tómelo al siguiente día. No olvides tomar agua a diario. Si mi bisabuela hubiera sabido leer y escribir diría lo siguiente: La parte favorita es el diálogo interior, anote el nombre de las personas a quienes odia, no puede ver ni en pintura, anote los defectos que según usted, los hechos, ellos/as tienen. No les desee el mal, ni el bien, guarde silencio mientras escribe. Anote algunas cualidades que pudieran tener, detenga esas cualidades por unos instantes en su mente. Queme

Había una vez y varias veces y a cada rato que el # 7 llegaba a preguntar a los niños durante el recreo; les preguntaba sobre los sentidos. -Niños del alma, niños del corazón quiero que me cuenten los sentidos de la canción. -El cuento de los sentidos. Pero ya te la contamos seis veces. Los niños corregían a Siete y con el último soplo del día gustosos contaban El séptimo sentido. ¿Dónde estaba antes de nacer? En el vientre de mamá. Aquí está el primero está en toda la piel sabe tocar la pegajosa miel y al roble lo hace noble. Tacto, se llama tacto. El segundo es la vista ah, es linda y muy lista ve colores, ve flores ve caminos sin dolores El tercero es el gusto Foto tomada del Norte Digital Juan Antonio Castillo. que de a poco da disgustos te dice que sabe rico y qué a tu boca no le gusta Aquí está el cuarto sentido desde la nariz viene aspirando y los olores acomodando olfato, se llama olfato. Escucho el corazón que late este es burro con mecate oi

Yo sentía tristeza pero no sabía, yo sentía rabia pero no sabía, yo sentía odio pero no sabía. Iba navegando la ola de la apariencia, caminaba pisando las hojas caídas, intentaba hacer crecer el árbol desde las hojas secas. Veía ángeles, hablaba con los muertos, te buscaba, siempre te busqué; cuando era niña me gustaba mucho compartir contigo mis avances escolares porque hasta las X rojas aplaudías y eran motivo de gracia. Recuerdo mi primer firma que halagaste tanto, yo tenía ocho años, dijiste que esa firma era tan preciosa y perfecta que parecía la firma de una secretaria. Estar a tu lado era sin duda el entusiasmo vivo, no tenías que hablar(aunque no te callabas), no tenías que moverte, ni bailar ni cantarme mi cancioncita (porque la mami, porque la mami), no tenías que esforzarte para que yo te adorara; es más en este momento tengo la capacidad de trasladarme a tu cielo y grito ¡ te amo !. Aquí hoy hay viento, mis ojos empañados, la perrita reposa a mis pies, en la pan

Yo sentía tristeza pero no sabía, yo sentía rabia pero no sabía, yo sentía odio pero no sabía. Iba navegando la ola de la apariencia, caminaba pisando las hojas caídas, intentaba hacer crecer el árbol desde las hojas secas. Veía ángeles, hablaba con los muertos, te buscaba, siempre te busqué; cuando era niña me gustaba mucho compartir contigo mis avances escolares porque hasta las X rojas aplaudías y eran motivo de gracia. Recuerdo mi primer firma que halagaste tanto, yo tenía ocho años, dijiste que esa firma era tan preciosa y perfecta que parecía la firma de una secretaria. Estar a tu lado era sin duda el entusiasmo vivo, no tenías que hablar(aunque no te callabas), no tenías que moverte, ni bailar ni cantarme mi cancioncita (porque la mami, porque la mami), no tenías que esforzarte para que yo te adorara; es más en este momento tengo la capacidad de trasladarme a tu cielo y grito ¡ te amo !. Aquí hoy hay viento, mis ojos empañados, la perrita reposa a mis pies, en la pan

Me citaron para ir a la oficina de Gabriela Espejo la candidata a diputada federal por el distrito 1; ella es oriunda de Ciudad Juárez. El abogado que me motivaba entrar a las candidaturas estaba locamente enamorado de mi, desde un principio le deje claro que no me interesaba su cortejo pero si la política, quiero entrar a la política pero no quiero asquearme, quiero ser yo ahí, quiero ser la habladora, filosofa creadoras en las filas de algún partido político, quiero ser candidata y ganar, eso quiero. Pero parecía que el destino me estaba jugado una broma estúpida, el que abría las puertas a ese mundo era nada mas y nada menos lo que yo defino como un perdedor. Un abogado idealista, un abogado enamorado de sus padres, un abogado que muchos lo contrataba pero casi nadie le pagaba. Era el abogado del pueblo. Un día me invito a su casa, jamas lo hubiera hecho; yo estaba en esos días donde el optimismo brota, derrocha positivas a cualquier propuesta. Iba con mi sobrina, el abogado, días a